30 enero 2010

31 DE ENERO: SAN JUAN BOSCO ( Don Bosco )



Don Bosco nace el 16 de agosto de 1815 en I Becchi – Castelnuovo, un pueblo no muy lejos de Turín – Italia. Hijo de Francisco Bosco y Margarita Occhiena. Su padre Francisco murió por causa de una pulmonía cuando Juan tenía la edad de dos años. Después de esta muerte, su madre, Margarita Occhiena se encarga de su crianza y su educación, la cual estuvo marcada por un gran amor, pero también con mucha disciplina.


“Para nosotros la base de toda santidad consiste en estar siempre alegres.” ( Don Bosco )


Juan Bosco, desde sus inicios, específicamente desde los 9 años, recibirá un aviso divino que marcará el desarrollo de toda su obra. En este sueño, llamado como “el sueño de los 9 años”, Jesús y la Virgen María le transmiten la esencia de su misión: convertir a aquellos jóvenes lobos –migrantes, maltratados en las fábricas.


”Alegría, estudio y piedad: es el mejor programa para hacerte feliz y que más beneficiará tu alma.” ( Don Bosco )


Viviendo en una sociedad materialista (principal característica de la revolución industrial), preocupados solo por el dinero, envueltos en los vicios de las ciudades grandes –en mansos corderitos– jóvenes con amor en sus corazones y capaces de ayudar a los más necesitados, jóvenes críticos y dispuestos a trabajar para salir adelante y liberarse de sus vicios–. Estos y otros sueños que se vinieron sucediendo, aunque no fueron comprendidos en un principio, se hacen realidad en cada una de las obras que Juan Bosco emprende en favor de tantos jóvenes como son los oratorios, la apertura de los talleres y su preocupación constante por su educación teórica y espiritual.


”Muéstrate siempre alegre, pero que tu sonrisa sea sincera.” ( Don Bosco )


La “Sociedad de la alegría” es la primera expresión de esta preocupación educativa, sobre todo en valores. El 29 de marzo de 1841 recibe el Sacramento del Diaconado y el 5 de junio de ese mismo año es ordenado sacerdote. Su trabajo empieza en Turín y luego se trasladará a todo el mundo, con la ayuda de sus hermanos de Congregación, Sociedad que será fundada en 1854 y que en sus inicios se llamaría Sociedad de San Francisco de Sales. San Juan Bosco dedica su vida a los jóvenes, escribe muchos libros, impulsa la creación de talleres, escuelas, oratorios y plantea un nuevo sistema educativo: el Sistema Preventivo.


”Para ser bueno basta practicar tres cosas y todo te resultará a pedir de boca. ¿Cuáles son estas tres cosas?: Alegría, estudio y piedad.” ( Don Bosco )


Este sistema resume la filosofía educativa de Juan Bosco en tres palabras: Razón, Religión y Amor. Para él es imposible educar a un joven por medio de la razón, si no se lo ama, se entiende sus problemas y se lo apoya a resolverlos, con la ayuda y la iluminación de Dios. En 1872, funda, conjuntamente con María Mazzarello, la Comunidad de las Hijas de María Auxiliadora. Congregación que desempeñará un trabajo similar al de San Juan Bosco, pero con mujeres.


“Dios favorece al hombre alegre.” ( Don Bosco )


Para 1875, es decir tres años más tarde, envía el primer grupo de misioneros a la Argentina y los años siguiente, los misioneros seguirán siendo enviados a varias partes del mundo, para t r a b a j a r p o r sus destinatarios preferenciales: los pobres y los jóvenes y para cre a r una sociedad más libre, más equitativa y más cristiana. Don Bosco muere el 31 de enero de 1888.


”Alegría, oración y comunión son el secreto de nuestra resistencia.” ( Don Bosco )

TESTIMONIO DEL ENCUENTRO DEL 7 DE SEPTIEMBRE- ANUNCIO DE LA PRIMERA MISA- LANÚS: CIUDAD DE MARÍA






Este 7 de septiembre el encuentro en la Placita, para esperar a la Mamá del Cielo, tuvo una fuerte componenete de emoción. Es que la segura alegria de Santa María del Espíritu Santo, por el anuncio de la primera Misa el 7 de cotubre, se notó… se notó en el cielo, se notó en el sol que renovó su milagro para que creamos, se notó en los Sacerdotes, se notó en los hermanos y hermanas del Cenáculo… Y se notó en las cientos de personas que peregrinamos al Lugar de Encuentro con Dios.

En el primer video verán un testimonio general del Cenáculo de Oración del 7 de septiembre pasado.


En el segundo video, la pésima situación meteorológica, cuando llegamos a la Plaza.


Y en el tercero, el cambio radical en el cielo ( PESE A TODOS LOS PRONÓSTICOS ), minutos antes de las 17 hs., mientras esperábamos en silencio que Santa María del Espíritu Santo descienda espiritualmente en el lugar, para derramar lluvias de gracias. Y siempre cumple la promesa.



En el cuarto, la danza del sol que nos acompañó en todo el rezo del Rosario. Signos de la presencia de María en Lanús. En el intenso frío, se sentía por momentos un fuerte calor… el abrazo de Madre para todos sus “hijitos”.



Una historia para compartir: Jorgelina es una simpática joven, madre de familia. Su pasión es coleccionar piedritas de lugares a donde viaja, o que le traen de recuerdo.El 7 de noviembre, mientras rezaba de rodillas, le cayó una piedra “como del cielo”. Entendió que se la regaló la Virgen. En la manchita blanca, muchos ven a la Madre.Paralelamente, aquel día, su hermano fue el fletero encargado de llevar la Imagen a la Plaza. Vio un arco de luz en el cielo, multicolor en inexplicable. Y comenzó a creer.Unos días después, se dieron cuenta de que habían estado en el mismo lugar, con la misma fe, sin saber uno del otro. Pueden ver la “piedrita” en el siguiente video.


Con respecto a las dos primeras imágenes, les contamos: Al mirar la última foto en la computadora, notamos una mancha roja en el ojo izquierdo de la Virgen. Ampliándola, se asemeja a sangre, que además aparece en otras partes de su rostro. Aclaro que no fue algo que se viera de ese modo en el lugar, como si hemos visto, y con mayor esplendor, el milagro del sol. Pero es notable que la foto salga así . Y es la única visible de las horas nocturnas, las demás salen distorsionadas, como lo han visto en el primer video.

Por eso María nació pura y limpia desde el principio. Sin mancha de pecado. Hasta ella no llegaría el contagio que Adán y Eva nos habían agarrado allá debajo del árbol, cuando desobedecieron a Dios. Ella quedó preservada de aquella herida, gracias a la obediencia de Jesucristo, el nuevo Adán, que venciera a Mandinga en el árbol de la cruz.¡Lindo regalo el del Hijo para su madre! De lo que a nosotros nos vendría a curar, ella la preservó. La hizo llena de gracia. Evidentemente, el Tata la estaba prefiriendo entre todas las mujeres, porque su vientre sería el lugar donde habría de nacer el fruto bendito que nos daría la salud a todos.Pero esta preferencia de Dios no significó para María el que todo le iba a resultar fácil y simple. Más vale lo contrario. A la planta que el jardinero ama, es a la que más poda. Y lo hace para que dé más fruto. Y que su fruto sea el mejor.(por Mamerto Menapace)

La Natividad de María- 8 de septiembre




La celebración de la fiesta de la Natividad de la Santísima Virgen María, es conocida en Oriente desde el siglo VI. Fue fijada el 8 de septiembre, día con el que se abre el año litúrgico bizantino, el cual se cierra con la Dormición, en agosto. En Occidente fue introducida hacia el siglo VII y era celebrada con una procesión-letanía, que terminaba en la Basílica de Santa María la Mayor.


El Evangelio no nos da datos del nacimiento de María, pero hay varias tradiciones. Algunas, considerando a María descendiente de David, señalan su nacimiento en Belén. Otra corriente griega y armenia, señala Nazareth como cuna de María.


Sin embargo, ya en el siglo V existía en Jerusalén el santuario mariano situado junto a los restos de la piscina Probática, o sea, de las ovejas. Debajo de la hermosa iglesia románica, levantada por los cruzados, que aún existe -la Basílica de Santa Ana- se hallan los restos de una basílica bizantina y unas criptas excavadas en la roca que parecen haber formado parte de una vivienda que se ha considerado como la casa natal de la Virgen.


Esta tradición, fundada en apócrifos muy antiguos como el llamado Protoevangelio de Santiago (siglo II), se vincula con la convicción expresada por muchos autores acerca de que Joaquín, el padre de María, fuera propietario de rebaños de ovejas. Estos animales eran lavados en dicha piscina antes de ser ofrecidos en el templo.


La fiesta tiene la alegría de un anuncio premesiánico. Es famosa la homilía que pronunció San Juan Damasceno (675-749) un 8 de septiembre en la Basílica de Santa Ana, de la cual extraemos algunos párrafos:


“¡Ea, pueblos todos, hombres de cualquier raza y lugar, de cualquier época y condición, celebremos con alegría la fiesta natalicia del gozo de todo el Universo. Tenemos razones muy válidas para honrar el nacimiento de la Madre de Dios, por medio de la cual todo el género humano ha sido restaurado y la tristeza de la primera madre, Eva, se ha transformado en gozo. Ésta escuchó la sentencia divina: parirás con dolor. A María, por el contrario, se le dijo: Alégrate, llena de gracia!
¡Oh feliz pareja, Joaquín y Ana, a ustedes está obligada toda la creación! Por medio de ustedes, en efecto, la creación ofreció al Creador el mejor de todos los dones, o sea, aquella augusta Madre, la única que fue digna del Creador. ¡Oh felices entrañas de Joaquín, de las que provino una descendencia absolutamente sin mancha! ¡Oh seno glorioso de Ana, en el que poco a poco fue creciendo y desarrollándose una niña completamente pura, y, después que estuvo formada, fue dada a luz! Hoy emprende su ruta la que es puerta divina de la virginidad. De Ella y por medio de Ella, Dios, que está por encima de todo cuanto existe, se hace presente en el mundo corporalmente. Sirviéndose de Ella, Dios descendió sin experimentar ninguna mutación, o mejor dicho, por su benévola condescendencia apareció en la Tierra y convivió con los hombres”.


Si pensamos por cuántas cosas podemos hoy alegrarnos, cuántas cosas podemos festejar y por cuántas cosas podemos alabar a Dios; todos los signos, por muchos y hermosos que sean, nos parecerán tan sólo un pálido reflejo de las maravillas que el Espíritu de Dios hizo en la Virgen María, y las que hace en nosotros, las que puede seguir haciendo… si lo dejamos.
Dios prepara la Maternidad Divina de María


Dios planeó desde toda la eternidad toda la obra admirable de la Encarnación del Verbo como culminación de la creación del Universo; y como quiera que en la mente sapientísima de Dios cabía simultáneamente la previsión del mal del hombre y de su restauración por medio del mismo verbo revestido de carne mortal, dentro de toda esta visión divina estaba también con preponderante papel, la persona y la misión de María Madre del Verbo hecho carne. Así, pues, la razón misma de ser de la Virgen María estaba en los designios del Altísimo aun antes del tiempo, en su carácter de Madre del Verbo Encarnado.


Nosotros pensamos y proyectamos, pero muchas veces nuestros proyectos, por hermosos y hacederos que parezcan, permanecen en la ineficacia; no ocurre así con Dios, cuyo poder no tiene límites. De ahí que, al pensar Dios desde toda la eternidad en María, Madre de su Hijo Unigénito hecho carne, confiera a esta elegida un carácter muy específico para su existencia. Por eso podemos concluir que la elección de María no es el escoger una persona determinada para una misión específica, sino la predestinación desde antes de los siglos de una Madre para Jesucristo.
La liturgia de la Iglesia dedica con insistencia a la Madre del Señor en sus festividades los textos de los libros sapienciales en los que aparece la Sabiduría, o la Esposa, en la mente de Dios desde antes de los tiempos:


“Desde el principio y antes de los siglos me creó, y para la eternidad viviré “(Ecl.24, 9).
“Yahvé me creó en el comienzo de sus designios, antes de sus obras más antiguas. Desde la eternidad fui constituida, desde el comienzo, antes del origen de la tierra.”
“Cuando el abismo no existía, fui yo engendrada, cuando no había fuentes ricas en aguas. Antes que los montes fueran fundados, antes de las colinas fui yo engendrada ” (Prov 8, 22-25).
Estas expresiones son aplicables a la Madre de Dios.

En la Bula “Ineffabilis Deus” de Pío IX leemos cómo “El Dios inefable, habiendo previsto desde toda la eternidad la lastimosísima caída de todo el género humano por la transgresión de Adán, decretó la primera obra de su bondad en el misterio oculto desde los siglos, por medio de la encarnación del Verbo.


“Es pues, la elección y predestinación de María algo íntimamente unido al decreto de la Redención que había de realizarse por el Verbo tan unido, que, concluye el Papa Pío IX, el destino de la Virgen fue preestablecido en un mismo decreto con la Encarnación de la Divina Sabiduría.“


Esta predestinación de Nuestra Señora, desde la eternidad, para ser Madre de Dios, empieza a realizarse con el tiempo. He aquí cómo lo expresa el Concilio Vaticano II:
” El benignísimo y sapientísimo Dios, al querer llevar a término la redención del mundo, cuando llegó la plenitud del tiempo, envió a su Hijo hecho de mujer… para que recibiésemos la adopción de hijos (Gál 4 4-5).
El cual por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación descendió de los cielos, y se encarnó por obra del Espíritu Santo de María Virgen.” (Credo de la Misa: Símbolo de Constantinopla).
Este misterio divino de salvación se nos revela y continúa en la Iglesia, a la que el Señor constituyó como su Cuerpo y en ella los fieles, unidos a Cristo, su Cabeza, en comunión con todos sus santos, deben también venerar la memoria “en primer lugar, de la gloriosa siempre Virgen María, Madre de nuestro Dios y Señor Jesucristo” (Canon de la Misa. Concilio Vaticano II: Constitución Apostólica “Lumen Gentium”, capítulo VIII n.52).


María, llena de gracia


Al tener el privilegio de nacer inmune de pecado, o sea la parte negativa de su santificación, la plenitud de gracia verifica la parte positiva de esa admirable limpieza original del alma de María. Ya que el pecado es absolutamente incompatible con la gracia, la misma plenitud de gracia de la Virgen exige de por sí la ausencia, en todo momento, del pecado original y actual.
La gracia es una participación de la naturaleza de Dios en la criatura racional, que, entonces, vive de la vida de Dios es un don sobrenatural que infundido por Dios en el alma, nos hace justos, agradables a Dios y amigos suyos, sus hijos adoptivos y herederos de la vida eterna.
En el Evangelio de San Lucas leemos: ” Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazareth, a una virgen desposada con un varón llamado José… entrando junto a ella, le dijo: Salve, llena de gracia, el Señor es contigo” (Lc l, 26-28).


Palabras semejantes de boca del arcángel en nombre de Dios no pueden menos de ser la expresión más palpable de la benevolencia divina, la que a su vez no puede ser menos que la plenitud de la gracia santificante. Esta sola prerrogativa de Nuestra Señora la haría de por sí acreedora al título especial de culto con que la honra el pueblo cristiano.


Virtudes de la Madre de Dios


Juntamente con la infusión de la gracia santificante, la criatura racional, en el momento de recibirla, recibe igualmente las virtudes sobrenaturales, es decir, esas fuerzas indispensables para poner en actividad la vida nueva que le ha sido dada: la fe, la esperanza, la caridad y demás virtudes morales infusas que, juntamente con los dones del Espíritu Santo, constituyen la estructura del organismo sobrenatural, es decir, todas las facultades y poderes de obrar bien y practicar actos virtuosos que le sirvan para conseguir méritos para la vida eterna.


María Santísima, al recibir desde el primer momento de su concepción la plenitud de gracia, conjuntamente fue adornada de la más profunda fe, de la más confiada esperanza y el más encendido amor de caridad con Dios y los prójimos, además de la infinidad de virtudes morales.
En el Evangelio y en la tradición cristiana aparece María llevando a la ejecución en grado heroico todas las más hermosas virtudes de que Dios adornó su alma, para que fuera digna Madre de Cristo, Dios y hombre verdadero.


“Bienaventurada la que ha creído que se cumplirán las cosas que se le han dicho de parte del Señor ” (Lc l, 45)
No podría darse mejor testimonio de la fe profunda de Nuestra Señora que esta expresión inspirada de su prima Isabel.


La esperanza anima toda la existencia terrena de Nuestra Señora: en virtud de ella resplandece el misterio de su soledad y sacrificio; la vemos asimismo en la espera de la venida del Espíritu Santo, en el Cenáculo, con los apóstoles: “Todos ellos perseveraban unánimes en la oración, con las mujeres, y con María, la Madre de Jesús, y con sus hermanos.” (Act l, l4)
La inmensa caridad de María la llevó a aceptar todo el peso del sacrificio que la vida, pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo le imponía para realizar los designios de Dios en beneficio de la humanidad.


No faltan, dentro de la notoria sobriedad evangélica en todo lo referente a la Madre del Señor, ciertos rasgos simpáticos de esa inmensa caridad y misericordia de la Virgen, como en las Bodas de Caná:


“Tres días después hubo una boda en Caná de Galilea, en la que se hallaba la madre de Jesús… Y como faltase vino, dijo a Jesús su madre: No tienen vino… La madre dijo a los sirvientes: Haced lo que El os diga” (Jn 2, l, ll)


También expresa el breve relato evangélico las demás virtudes morales de Nuestra Señora: su humildad, que la hace considerarse “sierva del Señor”, al mismo tiempo que era designada su Madre: “Dijo entonces María: He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra “(Lc l, 38)
Esa humildad profunda que atrajo las bondades del cielo:

“Mi alma glorifica al Señor, y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador, porque ha mirado la humilde condición de su sierva.” “Porque desde ahora me llamarán bienaventurada todas las generaciones.” ( Lc l, 48)


La obediencia ciega a los designios de Dios, por difíciles e incomprensibles que parecieran: “Se apareció en sueños el ángel del Señor a José y le dijo: ” Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto, y estate allí hasta que yo te avise… “Muerto Herodes, un ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto diciendo: Levántate, toma al niño y a su madre, y vuelve a la tierra de Israel; porque han muerto los que atentaban contra la vida del niño ” (Mt 2, l3, l9)


La prudencia resplandece en su posición discreta y sencilla, a pesar de la altísima dignidad, pero conforme en todo a la economía con que Jesús se manifestaba; la justicia en su exactitud en el cumplimiento legal de la purificación: ” Cuando se cumplieron los días de la purificación, según la Ley de Moisés, lo subieron a Jerusalén para ofrecerlo al Señor… Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: He aquí que este niño está destinado para ser caída y resurgimiento de muchos en Israel…” (Lc 2, 22,38)


La fortaleza, que la distingue como “Reina de los mártires”, es la virtud que resplandece en ella durante la pasión y muerte del Señor.
“Y una espada atravesará tu alma, para que sean descubiertos los pensamientos de muchos corazones ” (Lc 2,35)


La virtud de la templanza resalta de una manera peculiar en la virginidad perpetua de la Virgen.


Himno


Hoy nace una clara estrella,

tan divina y celestial,que,

con ser estrella, es tal,

que el mismo sol nace de ella.


De Ana y de Joaquín,

oriente de aquella estrella divina

,sale luz clara y digna de ser pura eternamente;

el alba más clara y bella no le puede ser igual,que,

con ser estrella, es tal,

que el mismo Sol nace de ella.


No le iguala lumbre alguna

de cuantas bordan el cielo,

porque es el humilde suelo de sus pies

la blanca luna:nace en el suelo tan bella

y con luz tan celestial,que,

con ser estrella, es tal,

que el mismo Sol nace de ella.


Gloria al Padre, y gloria al Hijo,gloria al Espíritu Santo,por los siglos de los siglos. Amén.


Oración: Concede, Señor, a tus hijos el don de tu gracia, para que, cuantos hemos recibido las primicias de la salvación por la maternidad de la Virgen María, consigamos aumento de paz en la fiesta de su Nacimiento. Por nuestro Señor Jesucristo.

Amén.


28 enero 2010

5 DE SEPTIEMBRE - BEATA MADRE TERESA DE CALCUTA



1910, 26 DE AGOSTO nació en Skopje (Macedonia), entonces perteneciente al Imperio Otomano, con el nombre de Agnes Gonxha Bojaxhiu.


"La mayor enfermedad hoy día no es la lepra ni la tuberculosis sino más bien el sentirse no querido, no cuidado y abandonado por todos. El mayor mal es la falta de amor y caridad, la terrible indiferencia hacia nuestro vecino que vive al lado de la calle, asaltado por la explotación, corrupción, pobreza y enfermedad.”
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1928, a los 18 años ingresó a la Orden de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto en la India.

"Dios no pretende de mi que tenga éxito. Sólo me exige que le sea fiel."
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1929, inició su viaje hacia India, llegando a Calcuta en enero.

"En el momento de la muerte, no se nos juzgará por la cantidad de trabajo que hayamos hecho, sino por el peso de amor que hayamos puesto en nuestro trabajo. Este amor debe resultar del sacrificio de sí mismos y ha de sentirse hasta que haga daño."
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1931, la Madre Teresa tomó el nombre de Teresa en honor a una Monja francesa Thérèse Martin quien fue canonizada en 1927 con el título de Santa Thérèse de Lisieux.

"Cuanto menos poseemos, más podemos dar. Parece imposible, pero no lo es. Esa es la lógica del amor."

Una vez un crítico le sugirió que haría mas para terminar con la pobreza si enseñara a pescar en vez de dar el pescado. Ella respondió: "Las personas que yo ayudo no se valen por si mismas, no se pueden parar. No pueden sostener la caña. Yo les daré el alimento y después se los enviaré a usted para que usted les enseñe a pescar".
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1937, la Madre Teresa hizo sus votos religiosos y enseñó por 20 años en el Colegio Santa María en Calcuta, India.

"Sé bien y lo saben cada una de mis hermanas, que lo que realizamos es menos que una gota en el océano. Pero si la gota le faltase, el océano carecería de algo."
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1946, el 10 de septiembre, recibió otra llamada de Dios, para dar servicio a los más pobres.

"Nosotros predicamos un Dios bueno, comprensivo, generoso y compasivo. Pero, ¿lo predicamos también a través de nuestras actitudes? Si queremos ser coherentes con lo que decimos, todos deben poder ver esa bondad, ese perdón y esa comprensión en nosotros."
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1948, el Papa Pío XII le concedió a la Madre Teresa permiso para ejercer su servicio pastoral como monja independiente y empezó a compartir su vida en las calles de Calcuta con los más pobres, los enfermos y los hambrientos.

"No basta con que digamos: Yo amo a Dios pero no amo a mi prójimo. San Juan dice que somos mentirosos si afirmamos que amamos a Dios y no amamos a nuestro prójimo. Es muy importante para nosotros darse cuenta de que el amor para que sea auténtico tiene que doler."
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1950, la Madre Teresa empezó a ayudar a las personas enfermas de lepra. Fundó una orden religiosa femenina llamada las Misioneras de la Caridad. Su trabajo inicial fue el de enseñar a leer a los niños pobres de la calle.

“Una sonrisa en los labios alegra nuestro corazón, conserva nuestro buen humor,
guarda nuestra alma en paz, vigoriza la salud, embellece nuestro rostro e inspira buenas obras.”
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1963, fundó la orden masculina "Hermanos Misioneros de la Caridad" junto a fray Joseph Langford.

“Nadie puede forzar o imponer la conversión: tiene lugar sólo por la gracia de Dios. La mejor conversión consiste en ayudar a las personas a amarse unas a otras. Nosotros, que somos pecadores, hemos sido creados para ser hijos de Dios y tenemos que ayudarnos mutuamente para estar lo más cerca posible de Él. Todos nosotros hemos sido llamados a amarle.”
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1965, el Papa Pablo VI colocó a la congregación de las Misioneras de la Caridad bajo el control del Papado y autorizó a la Madre Teresa a expandir la Orden religiosa en otros países. Alrededor de todo el mundo se abrieron centros para atender leprosos, ancianos, ciegos y personas que padecen del SIDA y se fundaron escuelas y orfanatos para los pobres y niños abandonados.

“Señor, renueva mi espíritu y dibuja en mi rostro
sonrisas de gozo por la riqueza de tu bendición.

Que mis ojos sonrían diariamente
por el cuidado y compañerismo
de mi familia y de mi comunidad.

Que mi corazón sonría diariamente
por las alegrías y dolores que compartimos.

Que mi boca sonría diariamente
con la alegría y regocijo de tus trabajos.

Que mi rostro dé testimonio diariamente
de la alegría que tú me brindas.

Gracias por este regalo de mi sonrisa, Señor.”
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1979, se le concede el Premio Nobel de la Paz.

Las palabras de Cristo son muy claras, pero debemos entenderlas como una
realidad viviente, tal como El las propuso. Cuando El habla de hambre, no habla solamente del hambre de pan, sino hambre de amor, hambre de ser comprendido, de ser querido.
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1980, viaja a Leganés (Madrid) a fundar una casa para sus Misioneras de la Caridad.

El fruto del silencio es la oración
El fruto de la oración es la fe
El fruto de la fe es el amor
El fruto del amor es el servicio
El fruto del servicio es la paz
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1984, Funda los Padres Misioneros de la Caridad.

Las Misioneras de la Caridad tienen como cuarto voto el servicio a los mas pobres (los primeros tres son pobreza, castidad y obediencia). Lo cumplen alrededor del mundo en cientos de casas dedicadas a los moribundos, albergues para mujeres y niños, casas para pacientes de SIDA, etc.
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1997, 5 DE SEPTIEMBRE muere en Calcuta, India.
2003, la Madre Teresa es beatificada por el Papa Juan Pablo II.
MISA DE BEATIFICACIÓN DE MADRE TERESA DE CALCUTA
HOMILÍA DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II

Domingo 19 de octubre de 2003

1. "El que quiera ser el primero, sea esclavo de todos" (Mc 10, 44). Estas palabras de Jesús a sus discípulos, que acaban de resonar en esta plaza, indican cuál es el camino que conduce a la "grandeza" evangélica. Es el camino que Cristo mismo recorrió hasta la cruz; un itinerario de amor y de servicio, que invierte toda lógica humana.

¡Ser siervo de todos!

Por esta lógica se dejó guiar la madre Teresa de Calcuta, fundadora de los Misioneros y de las Misioneras de la Caridad, a quien hoy tengo la alegría de inscribir en el catálogo de los beatos. Estoy personalmente agradecido a esta valiente mujer, que siempre he sentido junto a mí. Icono del buen samaritano, iba por doquier para servir a Cristo en los más pobres de entre los pobres. Ni siquiera los conflictos y las guerras lograban detenerla.

De vez en cuando, venía a hablarme de sus experiencias al servicio de los valores evangélicos. Recuerdo, por ejemplo, sus intervenciones en favor de la vida y en contra del aborto, también cuando le fue conferido el premio Nobel de la paz (Oslo, 10 de diciembre de 1979). Solía decir: "Si oís que una mujer no quiere tener a su hijo y desea abortar, tratad de convencerla de que me traiga a ese niño. Yo lo amaré, viendo en él el signo del amor de Dios".

2. ¿No es acaso significativo que su beatificación tenga lugar precisamente en el día en que la Iglesia celebra la Jornada mundial de las misiones? Con el testimonio de su vida, madre Teresa recuerda a todos que la misión evangelizadora de la Iglesia pasa a través de la caridad, alimentada con la oración y la escucha de la palabra de Dios. Es emblemática de este estilo misionero la imagen que muestra a la nueva beata mientras estrecha, con una mano, la mano de un niño, y con la otra pasa las cuentas del rosario.

Contemplación y acción, evangelización y promoción humana: madre Teresa proclama el Evangelio con su vida totalmente entregada a los pobres, pero, al mismo tiempo, envuelta en la oración.

3. "El que quiera ser grande, sea vuestro servidor" (Mc 10, 43). Con particular emoción recordamos hoy a madre Teresa, una gran servidora de los pobres, de la Iglesia y de todo el mundo. Su vida es un testimonio de la dignidad y del privilegio del servicio humilde. No sólo eligió ser la última, sino también la servidora de los últimos. Como verdadera madre de los pobres, se inclinó hacia todos los que sufrían diversas formas de pobreza. Su grandeza reside en su habilidad para dar sin tener en cuenta el costo, dar "hasta que duela". Su vida fue un amor radical y una proclamación audaz del Evangelio.

El grito de Jesús en la cruz, "tengo sed" (Jn 19, 28), expresa que la profundidad del anhelo de Dios por el hombre, penetró en el alma de madre Teresa y encontró un terreno fértil en su corazón. Saciar la sed de amor y de almas de Jesús en unión con María, la madre de Jesús, se convirtió en el único objetivo de la existencia de la madre Teresa, y en la fuerza interior que la impulsaba y la hacía superarse a sí misma e "ir deprisa" a través del mundo para trabajar por la salvación y la santificación de los más pobres de entre los pobres.

4. "Os digo que cuanto hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis" (Mt 25, 40). Este pasaje evangélico, tan fundamental para comprender el servicio de la madre Teresa a los pobres, fue la base de su convicción llena de fe de que al tocar los cuerpos quebrantados de los pobres, estaba tocando el cuerpo de Cristo. A Jesús mismo, oculto bajo el rostro doloroso del más pobre de entre los pobres, se dirigió su servicio. La madre Teresa pone de relieve el significado más profundo del servicio: un acto de amor hecho por los hambrientos, los sedientos, los forasteros, los desnudos, los enfermos y los prisioneros (cf. Mt 25, 34-36), es un acto de amor hecho a Jesús mismo.

Lo reconoció y lo sirvió con devoción incondicional, expresando la delicadeza de su amor esponsal. Así, en la entrega total de sí misma a Dios y al prójimo, la madre Teresa encontró su mayor realización y vivió las cualidades más nobles de su feminidad. Buscó ser un signo del "amor, de la presencia y de la compasión de Dios", y así recordar a todos el valor y la dignidad de cada hijo de Dios, "creado para amar y ser amado". De este modo, la madre Teresa "llevó las almas a Dios y Dios a las almas" y sació la sed de Cristo, especialmente de aquellos más necesitados, aquellos cuya visión de Dios se había ofuscado a causa del sufrimiento y del dolor.

5. "El Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate de todos" (Mc 10, 45). La madre Teresa compartió la pasión del Crucificado, de modo especial durante largos años de "oscuridad interior". Fue una prueba a veces desgarradora, aceptada como un "don y privilegio" singular.

En las horas más oscuras se aferraba con más tenacidad a la oración ante el santísimo Sacramento. Esa dura prueba espiritual la llevó a identificarse cada vez más con aquellos a quienes servía cada día, experimentando su pena y, a veces, incluso su rechazo. Solía repetir que la mayor pobreza era la de ser indeseados, la de no tener a nadie que te cuide.

6. "Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti". Cuántas veces, como el salmista, también madre Teresa, en los momentos de desolación interior, repitió a su Señor: "En ti, en ti espero, Dios mío".

Veneremos a esta pequeña mujer enamorada de Dios, humilde mensajera del Evangelio e infatigable bienhechora de la humanidad. Honremos en ella a una de las personalidades más relevantes de nuestra época. Acojamos su mensaje y sigamos su ejemplo.
Virgen María, Reina de todos los santos, ayúdanos a ser mansos y humildes de corazón como esta intrépida mensajera del amor. Ayúdanos a servir, con la alegría y la sonrisa, a toda persona que encontremos. Ayúdanos a ser misioneros de Cristo, nuestra paz y nuestra esperanza. Amén. ( Juan Pablo II )

26 enero 2010

Los "ídolos" de nuestra sociedad argentina.

Una de las metodologías más usadas por los docentes, es la del trabajo en grupos en clase. Sirve como metodología, porque los alumnos sociabilizan el conocimiento y como estrategia, si se eligen grupos no al azar, sino ubicando en cada uno de ellos a los líderes positivos, que son los que ayudarán en cada momentánea comunidad a llegar mejor a la meta propuesta en ese momento, aunque ni ellos ni los demás alumnos lo sepan ni se den cuenta. Cabe destacar que en toda agrupación de escolares, se manifiestan líderes positivos y negativos: la incentivación de los primeros logrará naturalmente neutralizar a los otros, en un lapso de tiempo medianamente prolongado del año escolar.

Esta estrategia no es milagrosa ni soluciona todas las problemáticas de aprendizaje en el aula, pero ayuda, junto a otras acciones que no es el caso describir ahora.

De alguna manera, así también funciona una sociedad: sociedad de hoy, profundamente mediatizada, donde Televisión, Internet y Radio, hacen y deshacen líderes e ídolos como por arte de magia.

Hace unos 10 días, la cantante Soledad Pastorutti batió todos los récords de venta de entradas al Festival de Folklore de Jesús María. Más moderada en su energía, dado que está embarazada, brindó un recital para el deleite de 25.000 personas. Soledad viene ganando muchísimo dinero desde pequeña: jamás hizo ostentación del mismo. Jamás tuvo un solo escándalo mediático. Sus valores: Dios, la familia, la amistad, las raíces y los recuerdos de la infancia que están siempre presentes en su vida y en sus canciones. Los medios, de algún modo docentes de nuestra sociedad ( reiteramos: profundamente mediatizada ), casi no se hicieron eco de su recital y su éxito. Ninguno de los canales más importantes, ninguna de las radios más escuchadas, ni de las páginas de Internet más visitadas han pasado el evento, ni han reporteado a la artista.

Paralelamente, se nos impone un líder e ídolo multimillonario que “hace con su dinero lo quiere”, INCLUSO COMPRAR HIJOS, del mismo modo que Rólex de Oro, 4x4 o botas de 5.000 dólares. ( Nunca de Industria Nacional, por supuesto ).

¿POR QUÉ DECIMOS COMPRAR HIJOS? Alguien que eligió en un book de fotos a la madre, pidió garantías de “pureza” de su raza para una inseminación artificial, definitiva y lamentablemente compró hijos, retrotrayéndonos a lo más bajo de la humanidad y a horrorosas ideologías del nazismo.

Sumemos ( o restemos, según como se mire ) que el nuevo idolatrado de los medios de comunicación convive con una serie de muchachos que deben obedecer sus órdenes alimentándose, moldeando su cuerpo y siguiendo el estilo de vida que se les imponga, y para quienes el final de un día cualquiera es en un boliche, bebiendo litros de alcohol y con barreras abiertas para el sexo libre.

Y nos da pena que tanta gente lo siga con devoción y admiración sin siquiera preguntarse, cuestionarse un solo instante quién es quién. Declarado públicamente ateo, cree que cada uno de nosotros es Dios. Un horror por dónde se lo mire.

Pensar que personas de estas características mediáticas, que ganan y hacen ganar dinero a unos pocos, por quienes se gastan horas de televisión, ríos de tinta, coros radiales y gigas de Internet, pueden hasta torcer al electorado en una elección,. Y no exageramos:¡ha sucedido!
Así mismo estamos convencidos de que la crítica por la crítica misma es inconducente.

Cristianos adultos, o por lo menos con ganas e instrumentos para crecer en la Fe: seamos líderes positivos en nuestros grupos de pertenencia cotidiana, dando nuestra opinión, siendo testimonio de un Evangelio vivo en nuestros corazones, que puja por salir . Ser testigos de la Luz, sal del mundo y levadura en la masa es nuestra diaria misión.

Amigos: ¡mucha oración a Santa María del Espíritu Santo, que vino a Lanús para bendecir estas tierra y estas almas, para que hagamos cada día una sociedad mejor donde Cristo sea el único Rey!

AVISO
Quien desea vivir en Dios, sabe que debe transformar su fe en obras y que todas ellas recibirán Su bendición por más pequeña que sea. Por eso, acerco a ustedes datos prácticos para aportar ayuda a las víctimas del desastre en Haití, no sin antes agregar que elevemos nuestra oración por las almas de los fallecidos, por todos los supervivientes y por quienes se encuentran en el lugar ayudando en la restauración de las islas.

ARGENTINA:

- UNICEF ha dispuesto una línea telefónica para recibir donaciones de dinero para aquellas personas e instituciones interesadas en colaborar con las víctimas del terremoto en Haití:
0-810-333-4455
Para mayor información contactar a: Matías Bohoslavsky, Comunicación – UNICEF ArgentinaTel: 5093-7149 / Cel: (15) 4193-8261 / mbohoslavsky@unicef.org
María José Ravalli, Comunicación – UNICEF ArgentinaTel: 5093-7144 / mjravalli@unicef.org
Pagina web: http://www.unicef.org/argentina

- CASCOS BLANCOSAlem 884 3º0f 310 (Ciudad Autónoma de Buenos Aires)

- CÁRITAS ARGENTINA
Tel. 0810-222-74827
Web: http://www.caritas.org.ar
Y en cualquier Parroquia de tu zona

VENEZUELA:

- CRUZ ROJA DE VENEZUELALista de insumos necesarios:Agua potableDirección en Caracas:Av. Andrés Bello, justo al lado de la Universidad Alejandro Humbolt y Frente a la torre Banco MercantilTeléfono: (0212)5780854.- CÁRITAS DE VENEZUELAEsta institución está recibiendo tanto aportes económicos como alimentos no perecederos, agua potable para los afectados en Haití.Banco Mercantil: Cuenta Corriente Nº: 01050699921699059454.Banco Provincia: Cuenta Corriente N°: 01080032320100003524.Rif: Asociación Civil Cáritas de Venezuela: J-30485697-0Depósitos a nombre de Cáritas de Venezuela.Centro de acopio: Av. Teherán, (antigua prolongación Av. Páez), 200 metros antes de la UCAB, frente a la Urb. Juan Pablo II, Sede de la CONFERENCIA EPISCOPAL VENEZOLANA, Montalbán, Caracas - Venezuela,- PROTECCIÓN CIVILEl Director de Protección Civil Venezuela pidió aunar esfuerzos para ayudar al pueblo de Haití a recuperarse de esta tragedia. También dijo que cualquier donativo que tanto empresas públicas, como privadas o personas particulares deseen hacerle llegar a Haití, pueden realizarlo a través de las direcciones estadales de Protección Civil a nivel nacional, para luego ser remitidas a la Dirección Nacional, encargada de coordinar los envíos al país afectado. Protección Civil aclaró que lo más importante es la entrega de alimentos no perecederos y agua potable. ATENCIÓN: Piden no envíen medicinas ni ropa y calzado usado.- EMBAJADA DE HAITÍ EN VENEZUELA: Dirección: Quinta Flor, 59 Av. Rosas-Urban San Rafael de Florida, Caracas.ATENCIÓN: Piden no donar dinero para los afectados.- MINISTERIO DE RELACIONES EXTERORES: En la sede del MRE se dispuso de un centro de acopio para reunir agua potable, alimentos no perecederos, medicinas, leche en polvo, ropa y calzado que serán llevados hasta Puerto Príncipe. El horario es de 09:00 am a 05:00 pm.Dirección: Avenida UrdanetaEl Silencio, Caracas, Distrito Capital(0212) 860 0209

COLOMBIA:

- UNICEF COLOMBIA:
http://www.unicef.org/colombia/

- CRUZ ROJA COLOMBIA:
http://www.cruzrojacolombiana.org/
Av.Cra68 #68 b-31 Bogotá, Telefono: 437 63 00

-CARITAS COLOMBIA:
Para aportar dinero, este organismo tiene habilitada la cuenta # 242016244 del Banco BBVA.

- DEFENSA CIVIL:
Cll. 73a # 73a - 54 en Bogotá

MÉXICO:

- CRUZ ROJA DE MEXICO:Juan Luis Vives #200Colonia Los Morales PolancoCP 11510México D.F.Tel: +(55)108449000- EMBAJADA DE HAITI EN MÉXICO:Presa Don Martín #53Colonia IrrigaciónDelegación Miguel HidalgoCP 11500México D.F.Teléfonos: +(55)5557-2065 y +(55)5580-2487/2259


25 enero 2010

25 de enero: Conversión de San Pablo



La Sagrada Biblia, en el capítulo 9 de los Hechos de los Apóstoles, narra así La Conversión de San Pablo:
"Saulo, respirando amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, se presentó al Sumo Sacerdote y le pidió cartas de recomendación para las sinagogas de los judíos de Damasco, para que si encontraba algunos seguidores de Cristo, los pudiera llevar presos y encadenados a Jerusalén.
Y sucedió que yendo de camino, cuando estaba cerca de Damasco, de repente le rodeó una luz venida del cielo; cayó en tierra y oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿Por qué me persigues?". El respondió: ¿Quién eres tú Señor? Y oyó que le decían: "Yo soy Jesús a quien tú persigues. Pero ahora levántate; entra en la ciudad, y allí se te dirá lo que tendrás que hacer".
Los hombres que iban con él se habían detenido mudos de espanto, pero no veían a nadie. Saulo se levantó del suelo, y aunque tenía los ojos abiertos no veía nada. Lo llevaron de la mano y lo hicieron entrar en Damasco. Pasó tres días sin comer y sin beber.
Había en Damasco un discípulo llamado Ananías. El Señor le dijo en una visión: ¡Ananías! El respondió: "Aquí estoy Señor" y el Señor le dijo: "Levántate. Vete a la calle Recta y pregunta en la casa de Judas por uno de Tarso que se llama Saulo; mira: él está en oración y está viendo que un hombre llamado Ananías entra y le coloca las manos sobre la cabeza y le devuelve la vista.
Respondió Ananías y dijo: "Señor, he oído a muchos hablar de ese hombre y de los males que ha causado a tus seguidores en Jerusalén, y que ha venido aquí con poderes de los Sumos Sacerdotes para llevar presos a todos los que creen en tu nombre".
El Señor le respondió: "Vete, pues a éste lo he elegido como un instrumento para que lleve mi nombre ante los que no conocen la verdadera religión y ante los gobernantes y ante los hijos de Israel. Yo le mostraré todo lo que tendrá que padecer por mi nombre".
Fue Ananías. Entró en la casa. Le colocó sus manos sobre la cabeza y le dijo: "Hermano Saulo: me ha enviado a ti el Señor Jesús, el que se te apareció en el camino por donde venías. Y me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu Santo". Al instante se le cayeron de los ojos unas como escamas y recobró la vista. Se levantó y fue bautizado. Tomó alimento y recobró las fuerzas.
Estuvo algunos días con los discípulos de Damasco y enseguida se puso a predicar en favor de Jesús, en las sinagogas o casas de oración, y decía que Jesús es el Hijo de Dios. Todos los que lo escuchaban quedaban admirados y decían: ¿No es éste el que en Jerusalén perseguía tan violentamente a los que invocaban el nombre de Jesús? Y ¿No lo habían enviado los Sumos Sacerdotes con cartas de recomendación para que se llevara presos y encadenados a los que siguen esa religión? "Pero Saulo seguía predicando y demostraba a muchos que Jesús es el Mesías, el salvador del mundo".
Saulo se cambió el nombre por el de Pablo. Y en la carta a los Gálatas dice: "Cuando Aquél que me llamó por su gracia me envió a que lo anunciara entre los que no conocían la verdadera religión, me fui a Arabia, luego volví a Damasco y después de tres años subí a Jerusalén para conocer a Pedro y a Santiago". Las Iglesias de Judea no me conocían pero decían: "El que antes nos perseguía, ahora anuncia la buena noticia de la fe, que antes quería destruir". Y glorificaban a Dios a causa de mí.
La conversión de San Pablo es uno de los mayores acontecimientos del siglo apostólico. Así lo proclama la Iglesia al dedicar un día del ciclo litúrgico a la conmemoración de tan singular efemérides. "Era, se ha escrito, la muerte repentina, trágica, del judío, y el nacimiento esplendoroso, fulgurante, del cristiano y del apóstol". San Jerónimo lo comentaba así: "El mundo no verá jamás otro hombre de la talla de San Pablo".
Saulo, nacido en Tarso, hebreo, fariseo rigorista, bien formado a los pies de Gamaliel, muy apasionado, ya había tomado parte en la lapidación del diácono Esteban, guardando los vestidos de los verdugos "para tirar piedras con las manos de todos", como interpreta agudamente San Agustín.
De espíritu violento, se adiestraba como buen cazador para cazar su presa. Con ardor indomable perseguía a los discípulos de Jesús. Pero Saulo cree perseguir, y es él el perseguido. Thompson, en El mastín del cielo, nos presenta a Dios como infatigable cazador de almas. Y cazará a Saulo.

Desde ahora "el camino de Damasco, la caída del caballo", quedarán como símbolo de toda conversión. Quizá nunca un suceso humano tuvo resultados tan fulgurantes. Quedaba el hombre con sus arrebatos, impetuoso y rápido, pero sus ideales estaban en el polo opuesto al de antes de su conversión. San Pablo será ahora como un fariseo al revés. Antes, sólo la Ley. En adelante únicamente Cristo será el centro de su vida.
La caída del caballo representa para Pablo un auténtico punto sin retorno. "Todo lo que para mí era ganancia, lo tengo por pérdida comparado con Cristo. Todo lo tengo por basura con tal de ganar a Cristo. Sólo una cosa me interesa: olvidando lo que queda atrás y lanzándome a lo que está delante, corro hacia la meta, hacia el galardón de Dios, en Cristo Jesús". Pablo es llamado "el Primero después del único".
La vocación de Pablo es un caso singular. Es un llamamiento personal de Cristo. Pero no quita valor al seguimiento de Pablo. En el Evangelio hay otros llamamientos personales del Señor, como el del joven rico y el de Judas Iscariote, que no le siguieron o no perseveraron. "Dios es un gran cazador y quiere tener por presa a los más fuertes" (Holzner). Pablo se rindió: "He sido cazado por Cristo Jesús". Pero pudo haberse rebelado.
Normalmente los llamamientos del Señor son mucho más sencillos, menos espectaculares. No suelen llegar en medio del huracán y la tormenta, sino sostenidos por la suave brisa, por el aura tenue de los acontecimientos ordinarios de la vida. Todos tenemos nuestro camino de Damasco. A cada uno nos acecha el Señor en el recodo más inesperado del camino.

Apóstol San Pablo: que tu conversión sea un ideal para todos y cada uno de nosotros. Que también en el camino de nuestra vida nos llame Cristo y nosotros le hagamos caso y dejemos nuestra antigua vida de pecado y empecemos una vida dedicada a la santidad, a las buenas obras y al apostolado.

Si lo que busco es agradar a la gente, no seré siervo de Cristo.

24 enero 2010

30 de agosto- Santa Rosa de Lima- Patrona de Lima, Hispanoamérica,Filipinas e Indias Orientales.



Durante toda su vida se vivió, en Lima – Perú, la denominada “época dorada de la santidad”. Una constelación de santos en el denominado entonces “Nuevo Mundo” tuvieron como escenario de vida esta ciudad: Rosa conoció a San Martín de Porres, y San Juan Masías, dominicos; fue confirmada en 1597 en Quives, Canta, por el segundo arzobispo de Lima, Santo Toribio de Mogrovejo y oyó las predicaciones de San Francisco Solano y San Juan Masías. En Lima se vivía en un ambiente propicio a la vivencia espiritual siendo que el continente americano hacía poco que había sido evangelizado.


Nació el 30 de abril de 1586 y falleció el 24 de agosto de 1617, como consecuencia de una aguda hemiplejía.


Fue hija de Gaspar Flores, natural de San Juan de Puerto Rico, arcabucero e hidalgo de segundo rango, y de la limeña María de Oliva.


Sabemos que este matrimonio tuvo 13 hijos, de los cuales conocemos los nombres de :
Hernando (1584), quien declaró abundantemente en el proceso de canonización de su hermana, Bernardina (1581), otra que muere a los 14 años, Francisco (1590), Juana (1592), Andrés, Gaspar, Antonio y Matías.


Rosa nació a las 4 de la tarde aproximadamente y testifica su madre que su parto fue bueno y sin trabajo.


Nuestra santa fue bautizada con el nombre de Isabel Herrera, como su abuela (así consta en el registro de bautizos de la parroquia de San Sebastián, realizado por don Antonio Polanco:
“En Domingo día de Pascua del Espíritu Santo, 25 de Mayo de 1586, bauticé a Isabel, hija de Gaspar Flores y María de Oliva, fueron padrinos Hernández de Valdez y María Orosco”.
Pero un hecho singular provoca que su madre la empiece a llamar Rosa.


A los tres meses, mientras la criada india la acunaba, todo su rostro se hizo una gran rosa y en medio de ella veía las facciones de sus ojos, boca , nariz y orejas como si hubiese puesto su cabecita en una rosa grande de un color muy encendido…
: “Yo te prometo, hija y alma mía, que mientras viviré, de mi boca no has de oír otro nombre sino Rosa”…expresó su madre y desde ese día así fue llamada.
Ese nombre nunca le resultó agradable, por lo poco común en aquella época y porque no se creía digna de portar un nombre sinónimo de hermosura. Pero a los 25 años, una visión le hizo cambiar de parecer, pues se vio como una hermosa rosa, puesta y cuidada en maceta como un tesoro del Señor.


Santa Rosa fue laica (no fue monja de clausura como a veces se cree). Vivió en casa de sus padres como terciaria dominica (usando el hábito dominico). Dedicaba la mitad de las horas del día al trabajo manual, tejiendo, bordando y cultivando flores en su jardín para aliviar en algo los gastos de su familia. Además auxiliaba a los pobres y más necesitados de Lima, acondicionando para ello una habitación de su hogar como enfermería. Vivió pues su anhelo de ser toda de Dios en la vida ordinaria. Ya en vida tuvo fama de santidad debido a esta incansable labor para con los menesterosos y olvidados de Lima y a la limpieza de su alma que irradiaba en todo el que le conocía. Esto explica que a su muerte fuese aclamada y llorada por toda la ciudad como ”nuestra santa, la Madre de los pobres de Lima”


De intensa vida espiritual, con fuertes experiencias místicas, videncias y tormentos adquirió fama de Santa en toda Lima, en vida.


Su proceso de beatificación fue rápido, dados los numerosos testimonios de santidad, videncias, caridad, amor a la Eucaristía y milagros producidos por su intermedio.
Rosa fue favorecida con repetidas visitas de la Virgen María. Tan familiar fue su trato con ella que, como buena madre, la despertaba en la mañana para ir a la oración.
Si bien fallece el 23 de agosto, la Iglesia argentina fue autorizada a que se celebre el día 30, en el que fue coronada Patrona de Hispanoamérica.


LA TORMENTA DE SANTA ROSA:
En estas latitudes ( zona central y este de Argentina ), durante la última semana de agosto y la primera de septiembre, suele producirse la entrada de una masa de aire cálido y húmedo ( en este 2.009, inusualmente intensa y persistente, con temperaturas propias de verano). Se genera en el sur de Brasil, producto del calentamiento de las aguas del Atlántico, dado que ya los rayos de sol caen más perpendicularmente en el final del invierno.
Paralelamente, el Polo Sur está muy frío aún, acercándose un poderoso frente frío que a su paso produce tormentas.


La Santa adquirió también gran popularidad en la zona del Río de La Plata, desde la época de la independencia. Se cuenta que una gran tormenta azotó a Buenos Aires en la primera festividad que se realizó en su nombre. Y la ocurrencia de fenómenos similares en otras oportunidades generalizó la creencia de que este tipo de tormentas ocurren debido a la Santa. Otras versiones mencionan que su fama llegó a estos pagos, por el lado de los tormentos físicos y pasionarios en sus visiones místicas. De allí asociarla a las tormentas meteorológicas.
En rigor de verdad, en los registros del Servicio Meteorológico Nacional de los últimos 103 años, en 56 oportunidades se produjo alguna tormenta, de intensidades variadas, en fechas próximas al 30 de agosto. Nada sobrenatural las ha producido, sino la explicación dada por el Servicio Meteorológico.


De todos modos, la intención de este posteo es valorizar las virtudes de una gran Santa.Muy probablemente tengamos tormenta en estos días, dada la ola de calor inusual y será una oportunidad para recordar a Santa Rosa de Lima.
Que Santa Rosa los bendiga, estamos por recibir la visita n° 10.000; que por su intersección sigamos avanzando en el amor y conocimiento de la advocación de Santa María del Espíritu Santo, para gloria de Dios.


Fuentes: Arzobispado de Lima, Perú y Servicio Meteorológico Nacional Argentino.

22 de agosto: Coronación de la Virgen como Reina de la Creación

Quinto Misterio Glorioso del Santo Rosario, meditado por Santa María del Espíritu Santo: La Coronación de María Santísima:

“Pequeños míos, en el quinto Misterio de Gloria vamos a meditar en mi Corazón como Reina y Señora de toda la creación.
Hijitos, Mi Hijo y Dios, junto con el Espíritu Santo, me dan la Gracia de ser Coronada Reina de toda la creación que Ellos hicieron.
Hijitos, vosotros sois míos también y muchos de vuestros hermanos, aún no me reconocen como vuestra Madre.
Eso no significa que Yo no los ame a ellos también. Yo soy vuestra Madre. Yo también estoy al lado de ellos, solo que vosotros sí aceptáis mis besos y mis caricias, otros no.
Hijos, a mi Hijo vuestro Señor, eso lo hiere. Porque lo que a Mi me hace feliz, también a Él y lo que a Él lo hace feliz, a Mi también.
Hijos, acá todo es amor, si vosotros estáis Conmigo amaréis mucho, nunca dejaréis a otro sin vuestra mirada y consuelo.
Hijos, Yo soy la Reina del Cielo y de la tierra.
Hijitos, pedid a Dios que por mi intercesión todos un día se den la mano y me acepten como Madre y a Mi Hijo como Rey de todo el universo.
Hijitos, esta es la última vez que Yo os daré los mensajes de esta manera.
Hijitos, hijos os digo que os amo mucho, mucho.
Hijitos, vosotros se, vosotros me amáis a Mi también.
Amén, Amén”.


CARTA ENCÍCLICA AD CAELI REGINAM

DE NUESTRO SANTÍSIMO SEÑOR PÍO POR LA DIVINA PROVIDENCIA PAPA XII A LOS VENERABLES HERMANOS PATRIARCAS, PRIMADOS, ARZOBISPOS, OBISPOS Y DEMÁS ORDINARIOS LOCALES, EN PAZ Y COMUNIÓN CON LA SEDE APOSTÓLICA

SOBRE LA REALEZA DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
Y LA INSTITUCIÓN DE SU FIESTA
VENERABLES HERMANOS
SALUD Y BENDICIÓN APOSTÓLICA

4. Con razón ha creído siempre el pueblo cristiano, aun en los siglos pasados, que Aquélla, de la que nació el Hijo del Altísimo, que «reinará eternamente en la casa de Jacob» y [será] «Príncipe de la Paz», «Rey de los reyes y Señor de los señores», por encima de todas las demás criaturas recibió de Dios singularísimos privilegios de gracia. Y considerando luego las íntimas relaciones que unen a la madre con el hijo, reconoció fácilmente en la Madre de Dios una regia preeminencia sobre todos los seres.
Por ello se comprende fácilmente cómo ya los antiguos escritores de la Iglesia, fundados en las palabras del arcángel San Gabriel que predijo el reinado eterno del Hijo de María, y en las de Isabel que se inclinó reverente ante ella, llamándola «Madre de mi Señor», al denominar a María «Madre del Rey» y «Madre del Señor», querían claramente significar que de la realeza del Hijo se había de derivar a su Madre una singular elevación y preeminencia.

5. Por esta razón San Efrén, con férvida inspiración poética, hace hablar así a María: «Manténgame el cielo con su abrazo, porque se me debe más honor que a él; pues el cielo fue tan sólo tu trono, pero no tu madre. ¡Cuánto más no habrá de honrarse y venerarse a la Madre del Rey que a su trono!». Y en otro lugar ora él así a María: «... virgen augusta y dueña, Reina, Señora, protégeme bajo tus alas, guárdame, para que no se gloríe contra mí Satanás, que siembra ruinas, ni triunfe contra mí el malvado enemigo».
San Gregorio Nacianceno llama a María «Madre del Rey de todo el universo», «Madre Virgen, que dio a luz al Rey de todo el mundo». Prudencio, a su vez, afirma que la Madre se maravilló «de haber engendrado a Dios como hombre sí, pero también como Sumo Rey».
Esta dignidad real de María se halla, además, claramente afirmada por quienes la llaman «Señora», «Dominadora» y «Reina».
Ya en una homilía atribuida a Orígenes, Isabel saluda a María «Madre de mi Señor», y aun la dice también: «Tú eres mi señora».
Lo mismo se deduce de San Jerónimo, cuando expone su pensamiento sobre las varias "interpretaciones" del nombre de "María": «Sépase que María en la lengua siriaca significa Señora». E igualmente se expresa, después de él, San Pedro Crisólogo: «El nombre hebreo María se traduce Domina en latín; por lo tanto, el ángel la saluda Señora para que se vea libre del temor servil la Madre del Dominador, pues éste, como hijo, quiso que ella naciera y fuera llamada Señora».
San Epifanio, obispo de Constantinopla, escribe al Sumo Pontífice Hormidas, que se ha de implorar la unidad de la Iglesia «por la gracia de la santa y consubstancial Trinidad y por la intercesión de nuestra santa Señora, gloriosa Virgen y Madre de Dios, María».
Un autor del mismo tiempo saluda solemnemente con estas palabras a la Bienaventurada Virgen sentada a la diestra de Dios, para que pida por nosotros: «Señora de los mortales, santísima Madre de Dios».
San Andrés de Creta atribuye frecuentemente la dignidad de reina a la Virgen, y así escribe: «(Jesucristo) lleva en este día como Reina del género humano, desde la morada terrenal (a los cielos) a su Madre siempre Virgen, en cuyo seno, aun permaneciendo Dios, tomó la carne humana«. Y en otra parte: «Reina de todos los hombres, porque, fiel de hecho al significado de su nombre, se encuentra por encima de todos, si sólo a Dios se exceptúa».
También San Germán se dirige así a la humilde Virgen: «Siéntate, Señora: eres Reina y más eminente que los reyes todos, y así te corresponde sentarte en el puesto más alto»; y la llama «Señora de todos los que en la tierra habitan».
San Juan Damasceno la proclama «Reina, Dueña, Señora» y también «Señora de todas las criaturas»; y un antiguo escritor de la Iglesia occidental la llama «Reina feliz», «Reina eterna, junto al Hijo Rey, cuya nívea cabeza está adornada con áurea corona».
Finalmente, San Ildefonso de Toledo resume casi todos los títulos de honor en este saludo: «¡Oh Señora mía!, ¡oh Dominadora mía!: tú mandas en mí, Madre de mi Señor..., Señora entre las esclavas, Reina entre las hermanas».

6. Los Teólogos de la Iglesia, extrayendo su doctrina de estos y otros muchos testimonios de la antigua tradición, han llamado a la Beatísima Madre Virgen Reina de todas las cosas creadas, Reina del mundo, Señora del universo.

7. Los Sumos Pastores de la Iglesia creyeron deber suyo el aprobar y excitar con exhortaciones y alabanzas la devoción del pueblo cristiano hacia la celestial Madre y Reina.
Dejando aparte documentos de los Papas recientes, recordaremos que ya en el siglo séptimo Nuestro Predecesor San Martín llamó a María «nuestra Señora gloriosa, siempre Virgen»; San Agatón, en la carta sinodal, enviada a los Padres del Sexto Concilio Ecuménico, la llamó «Señora nuestra, verdadera y propiamente Madre de Dios»; y en el siglo octavo, Gregorio II en una carta enviada al patriarca San Germán, leída entre aclamaciones de los Padres del Séptimo Concilio Ecuménico, proclamaba a María «Señora de todos y verdadera Madre de Dios y Señora de todos los cristianos».
Recordaremos igualmente que Nuestro Predecesor, de ilustre memoria, Sixto IV, en la bula Cum praexcelsa, al referirse favorablemente a la doctrina de la inmaculada concepción de la Bienaventurada Virgen, comienza con estas palabras: «Reina, que siempre vigilante intercede junto al Rey que ha engendrado». E igualmente Benedicto XIV, en la bula Gloriosae Dominae llama a María «Reina del Cielo y de la tierra», afirmando que «el Sumo Rey le ha confiado a ella, en cierto modo, su propio imperio».
Por ello San Alfonso de Ligorio, resumiendo toda la tradición de los siglos anteriores, escribió con suma devoción: «Porque la Virgen María fue exaltada a ser la Madre del Rey de los reyes, con justa razón la Iglesia la honra con el título de Reina».

II. LITURGIA

8. La sagrada Liturgia, fiel espejo de la enseñanza comunicada por los Padres y creída por el pueblo cristiano, ha cantado en el correr de los siglos y canta de continuo, así en Oriente como en Occidente, las glorias de la celestial Reina.

9. Férvidos resuenan los acentos en el Oriente: «Oh Madre de Dios, hoy eres trasladada al cielo sobre los carros de los querubines, y los serafines se honran con estar a tus órdenes, mientras los ejércitos de la celestial milicia se postran ante Ti».
Y también: «Oh justo, beatísimo [José], por tu real origen has sido escogido entre todos como Esposo de la Reina Inmaculada, que de modo inefable dará a luz al Rey Jesús». Y además: «Himno cantaré a la Madre Reina, a la cual me vuelvo gozoso, para celebrar con alegría sus glorias... Oh Señora, nuestra lengua no te puede celebrar dignamente, porque Tú, que has dado a la luz a Cristo Rey, has sido exaltada por encima de los serafines. ... Salve, Reina del mundo, salve, María, Señora de todos nosotros».
En el Misal Etiópico se lee: «Oh María, centro del mundo entero..., Tú eres más grande que los querubines plurividentes y que los serafines multialados. ... El cielo y la tierra están llenos de la santidad de tu gloria».

10. Canta la Iglesia Latina la antigua y dulcisima plegaria "Salve Regina", las alegres antífonas "Ave Regina caelorum", "Regina caeli laetare alleluia" y otras recitadas en las varias fiestas de la Bienaventurada Virgen María: «Estuvo a tu diestra como Reina, vestida de brocado de oro»; «La tierra y el cielo te cantan cual Reina poderosa»; «Hoy la Virgen María asciende al cielo; alegraos, porque con Cristo reina para siempre».
A tales cantos han de añadirse las Letanías Lauretanas que invitan al pueblo católico diariamente a invocar como Reina a María; y hace ya varios siglos que, en el quinto misterio glorioso del Santo Rosario, los fieles con piadosa meditación contemplan el reino de María que abarca cielo y tierra.

11. Finalmente, el arte, al inspirarse en los principios de la fe cristiana, y como fiel intérprete de la espontánea y auténtica devoción del pueblo, ya desde el Concilio de Éfeso, ha acostumbrado a representar a María como Reina y Emperatriz que, sentada en regio trono y adornada con enseñas reales, ceñida la cabeza con corona, y rodeada por los ejércitos de ángeles y de santos, manda no sólo en las fuerzas de la naturaleza, sino también sobre los malvados asaltos de Satanás. La iconografía, también en lo que se refiere a la regia dignidad de María, se ha enriquecido en todo tiempo con obras de valor artístico, llegando hasta representar al Divino Redentor en el acto de ceñir la cabeza de su Madre con fúlgida corona.

12. Los Romanos Pontífices, favoreciendo a esta devoción del pueblo cristiano, coronaron frecuentemente con la diadema, ya por sus propias manos, ya por medio de Legados pontificios, las imágenes de la Virgen Madre de Dios, insignes tradicionalmente en la pública devoción.

III. RAZONES TEOLÓGICAS

13. Como ya hemos señalado más arriba, Venerables Hermanos, el argumento principal, en que se funda la dignidad real de María, evidente ya en los textos de la tradición antigua y en la sagrada Liturgia, es indudablemente su divina maternidad. De hecho, en las Sagradas Escrituras se afirma del Hijo que la Virgen dará a luz: «Será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y reinará en la casa de Jacob eternamente, y su reino no tendrá fin»; y, además, María es proclamada «Madre del Señor». Síguese de ello lógicamente que Ella misma es Reina, pues ha dado vida a un Hijo que, ya en el instante mismo de su concepción, aun como hombre, era Rey y Señor de todas las cosas, por la unión hipostática de la naturaleza humana con el Verbo.
San Juan Damasceno escribe, por lo tanto, con todo derecho: «Verdaderamente se convirtió en Señora de toda la creación, desde que llegó a ser Madre del Creador»; e igualmente puede afirmarse que fue el mismo arcángel Gabriel el primero que anunció con palabras celestiales la dignidad regia de María.

14. Mas la Beatísima Virgen ha de ser proclamada Reina no tan sólo por su divina maternidad, sino también en razón de la parte singular que por voluntad de Dios tuvo en la obra de nuestra eterna salvación. «¿Qué cosa habrá para nosotros más dulce y suave —como escribía Nuestro Predecesor, de feliz memoria, Pío XI— que el pensamiento de que Cristo impera sobre nosotros, no sólo por derecho de naturaleza, sino también por derecho de conquista adquirido a costa de la Redención? Ojalá que todos los hombres, harto olvidadizos, recordasen cuánto le hemos costado a nuestro Salvador; "Fuisteis rescatados, no con oro o plata, ... sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un Cordero inmaculado". No somos, pues, ya nuestros, puesto que Cristo "por precio grande" nos ha comprado».
Ahora bien, en el cumplimiento de la obra de la Redención, María Santísima estuvo, en verdad, estrechamente asociada a Cristo; y por ello justamente canta la Sagrada Liturgia: «Dolorida junto a la cruz de nuestro Señor Jesucristo estaba Santa María, Reina del cielo y de la tierra».
Y la razón es que, como ya en la Edad Media escribió un piadosísimo discípulo de San Anselmo: «Así como... Dios, al crear todas las cosas con su poder, es Padre y Señor de todo, así María, al reparar con sus méritos las cosas todas, es Madre y Señor de todo: Dios es el Señor de todas las cosas, porque las ha constituido en su propia naturaleza con su mandato, y María es la Señora de todas las cosas, al devolverlas a su original dignidad mediante la gracia que Ella mereció». La razón es que, «así como Cristo por el título particular de la Redención es nuestro Señor y nuestro Rey, así también la Bienaventurada Virgen [es nuestra Señora y Reina] por su singular concurso prestado a nuestra redención, ya suministrando su sustancia, ya ofreciéndolo voluntariamente por nosotros, ya deseando, pidiendo y procurando para cada uno nuestra salvación».

15. Dadas estas premisas, puede argumentarse así: Si María, en la obra de la salvación espiritual, por voluntad de Dios fue asociada a Cristo Jesús, principio de la misma salvación, y ello en manera semejante a la en que Eva fue asociada a Adán, principio de la misma muerte, por lo cual puede afirmarse que nuestra redención se cumplió según una cierta "recapitulación", por la que el género humano, sometido a la muerte por causa de una virgen, se salva también por medio de una virgen; si, además, puede decirse que esta gloriosísima Señora fue escogida para Madre de Cristo precisamente «para estar asociada a El en la redención del género humano» «y si realmente fue Ella, la que, libre de toda mancha personal y original, unida siempre estrechísimamente con su Hijo, lo ofreció como nueva Eva al Eterno Padre en el Gólgota, juntamente con el holocausto de sus derechos maternos y de su maternal amor, por todos los hijos de Adán manchados con su deplorable pecado»; se podrá de todo ello legítimamente concluir que, así como Cristo, el nuevo Adán, es nuestro Rey no sólo por ser Hijo de Dios, sino también por ser nuestro Redentor, así, según una cierta analogía, puede igualmente afirmarse que la Beatísima Virgen es Reina, no sólo por ser Madre de Dios, sino también por haber sido asociada cual nueva Eva al nuevo Adán.
Y, aunque es cierto que en sentido estricto, propio y absoluto, tan sólo Jesucristo —Dios y hombre— es Rey, también María, ya como Madre de Cristo Dios, ya como asociada a la obra del Divino Redentor, así en la lucha con los enemigos como en el triunfo logrado sobre todos ellos, participa de la dignidad real de Aquél, siquiera en manera limitada y analógica. De hecho, de esta unión con Cristo Rey se deriva para Ella sublimidad tan espléndida que supera a la excelencia de todas las cosas creadas: de esta misma unión con Cristo nace aquel regio poder con que ella puede dispensar los tesoros del Reino del Divino Redentor; finalmente, en la misma unión con Cristo tiene su origen la inagotable eficacia de su maternal intercesión junto al Hijo y junto al Padre.

23 enero 2010

Los números en la Biblia



En la Biblia, se usan repetidamente determinados números con un significado simbólico que, en todo proceso de lectura, debe tenerse en cuenta:


..... Uno....

Se utiliza para trasmitir el concepto de la unidad y unicidad de Dios, un Dios único, Uno Cristo y el Padre. Expresa, también, la unidad a la que tenemos que tender los cristianos. Jesús reza: “que sean uno”.
El concepto de unión se encuentra igualmente en el dicho de Jesús referente al matrimonio, "no son ya más dos, sino una sola carne".
El apóstol Pablo describe un círculo completo, que consta de siete unidades distintas: un cuerpo, un espíritu, una esperanza, un Señor, una fe, un bautismo, un Dios. Por lo tanto, el número uno es un número primario. Todos los otros números dependen del UNO. Precede y produce todos los otros números.
El número UNO es el número de Dios

....Dos....

Puede ser un número tanto de unidad como de división. El hombre y la mujer forman la unidad básica de la familia. Los animales se asocian por pares y entran al arca de dos en y los discípulos fueron enviados de dos en dos. Además, en el Sinaí hubo dos tablas de piedra, y a menudo se ofrecían los animales para el sacrificio en pares.
Por contraste, el dos se usa con fuerza de separación en la dualidad que existe en al alma del hombre. Dos caminos posibles: con Dios o sin Dios.

....Tres....

Cristo resucitó al tercer día. Tres veces lo niega Pedro y tres veces Jesús resucitado le pregunta si lo ama para reparar. Y en cada una de esas tres veces le encarga poner en marcha su Iglesia.
Tres son las virtudes destacadas por Pablo : Fe, Esperanza y Caridad.
Tres las palabras que utiliza Jesús para autodefinirse: Camino, Verdad y Vida.

....Cuatro....

El número de los lados de un cuadrado, es uno de los símbolos de lo completo en la Biblia. Expresa simbólicamente todo lo que el hombre tiene a su disposición: la tierra completa. El nombre divino Yahvéh tiene cuatro letras en hebreo (YHWH). Cuatro eran los ríos que salían del jardín de Edén, y cuatro ángulos tiene la tierra de donde soplan los cuatro vientos.
Además, existen cuatro evangelios, y en la época en que el evangelio se extendió a los gentiles, Pedro vio en visión un lienzo bajado por sus cuatro puntas.

....Cinco, diez, y sus múltiplos....

Aparecen frecuentemente debido a que en Palestina se empleaba el sistema decimal. El número cinco indica la gracia de Dios. En el AT se mencionan diez patriarcas antes del diluvio. Los egipcios sufrieron diez plagas, y hubo Diez mandamientos. Un décimo formaba el diezmo. En la parábola de Lc. 15.8 la mujer poseía diez dracmas, y en la parábola de las minas se hace mención de diez minas, diez sirvientes, y diez ciudades. De las diez vírgenes, en la parábola de la boda de su Señor, cinco eran prudentes y cinco insensatas . El hombre rico tenía cinco hermanos; la mujer junto al pozo había tenido cinco maridos , y en la alimentación de los cinco mil el muchacho tenía cinco panes. Existen diez poderes que no pueden separar al creyente del amor de Dios, y diez pecados que excluyen del reino de Dios

....Seis....

En el relato de la creación Dios creó al hombre y a la mujer en el sexto día. Seis días se le asignaron al hombre para trabajar. El siervo hebreo tenía que servir durante seis años antes de ser liberado.
El número seis, en consecuencia, se halla íntimamente asociado con el hombre.
Falta, imperfección (una unidad menos que el número perfecto de siete).
Los judíos en Caná tenían seis tinajas de agua para la purificación, pero expresaban lo insuficiente de las ordenanzas para suplir necesidades del hombre.

....Siete....

Siete demonios efectuaron la completa posesión de María Magdalena (Lc. 8.2); el dragón de Ap. 12.3 y la bestia de Ap. 13.1; 17.7 tienen siete cabezas.
Otras referencias dignas de mención son: la madre de siete hijos (Jer. 15.9; 2 Mac. 7.1ss); siete mujeres para un hombre (Is. 4.1); una nuera amante es preferible a siete hijos varones (Rt. 4.15). Los saduceos propusieron un caso de matrimonio por levirato con siete hermanos (Mt. 22.25). Los sacerdotes dieron siete vueltas a Jericó (Jos. 6.4). El sirviente de Elías miró al mar siete veces en busca de lluvia (1 R. 18.43). El salmista alababa a Dios siete veces al día (Sal. 119.164), y Gn. 29.18; 41.29, 54 y Dn. 4.23 mencionan siete años (tiempos). La iglesia primitiva tenía siete diáconos (Hch. 6.3), y Juan se dirige a siete iglesias en el libro de Apocalipsis, en donde se mencionan siete candeleros de oro (1.12) y siete estrellas (1.16). En la alimentación milagrosa de los 4.000 con siete panes y unos pocos panecillos (Mr. 8.1–9), las siete canastas que se recolectaron posteriormente pueden indicar que Jesús es capaz de satisfacer completamente.

....Ocho....

La Biblia cuenta que ocho personas se salvaron en el arca de Noé. La circuncisión del varón judío se llevaba a cabo al octavo día. En la visión que tuvo Ezequiel del templo nuevo los sacerdotes sacrificaban en el octavo día. El número 8 indica un nuevo comienzo, la capacidad humana de rever y corregir su camino.

....Doce....

El año hebreo estaba dividido en doce meses, el día en doce horas .Israel tuvo doce hijos y las tribus de Israel, el pueblo de Dios, eran doce. Cristo eligió doce apóstoles. El doce, por lo tanto, está ligado a los propósitos electivos de Dios, a la Iglesia a quienes seguimos las enseñanzas de los Doce que provienen de un Pueblo Elegido, generado por doce tribus.

....Cuarenta....

Tiene que ver con casi todas las manifestaciones nuevas en la historia de los portentosos actos de Dios, especialmente los de salvación, por ejemplo el diluvio, la redención de Egipto, Elías y la era profética, el advenimiento de Cristo y el nacimiento de la iglesia. Podemos mencionar los siguientes períodos de cuarenta días: las cataratas de agua durante el diluvio; los ayunos de Moisés en el monte; la oración de Moisés por Israel, el tiempo que pasó Cristo en el desierto antes de su tentación y sus apariciones después de la resurrección .Con respecto al período de cuarenta años, la cifra general para una generación, podemos mencionar lo siguiente: las divisiones principales de la vida de Moisés; la peregrinación del pueblo de Israel en el desierto; el modelo de servidumbre y liberación que se repite en la era de los jueces; los reinados de Saúl, David, y Salomón; la desolación de Egipto. La Iglesia toma el 40, como un tiempo de preparación, de camino, de purificación; de allí, la cuaresma anterior al Triduo Pascual.

....Setenta....

Se relaciona a menudo con la administración del mundo por parte de Dios. Después del diluvio el mundo fue repoblado por medio de setenta descendientes de Noé; setenta personas bajaron a Egipto ; se nombraron setenta ancianos para ayudar a Moisés a administrar a Israel en el desierto; el pueblo de Judá pasó setenta años de exilio en Babilonia; setenta semanas, "sietes", fueron decretadas por Dios como el período en el que debía cumplirse la redención mesiánica; Jesús envió a los Setenta y dijo que se debía perdonar "hasta setenta veces siete".

....666....

Es el número de la bestia en el Apocalipsis. Se han propuesto muchas interpretaciones de este número, y por gema tría, recurso en el cual se da a los números el valor de las letras correspondientes, el número 666 se ha identificado con los valores numéricos de los nombres de una variedad de personajes célebres, desde Calígula hasta Nerón, y otros posteriormente, y con conceptos tales como el monstruo del caos.


Ap. 7.4; 14.1 registra el número 144.000, "que fueron sellados". Es el número doce, el número de elección, elevado al cuadrado y multiplicado por mil, número indefinidamente grande, y que simboliza el número total de santos de ambos pactos que son preservados por Dios. La multitud de fieles que esperamos la venida del Señor.

Que nuestra Madre, en la advocación de Santa María del Espíritu Santo, llene tu corazón con su Gracia y cubra con tu manto todas tus buenas intenciones, querido lector. Hasta el próximo post.

Fuentes: ARIEL ÁLVAREZ VALDÉS ¿Qué sabemos de la Biblia? Ed. San Pablo
              Comentarios a la Biblia- Ed: Verbo Divino.